Con el correr de los años, y salvo en contadas ocasiones, la entrega de los premios "Oscar" se ha convertido en el reflejo más notorio del marcado declive del cine dramático norteamericano, con respecto a las propuestas que llegan tanto desde Europa como de Asia. A raíz de ello, la tan venerada academia de Hollywood, en su intento de disimular esta tendencia, que ya lleva más de una década, entrega casi una decena de nominaciones a mejor película a producciones locales de no tanta valía, confinando al rubro de película extranjera a las más importantes cintas de cada año, como es el caso del filme que nos ocupa.Aún sin haber conseguido el Oscar, Incendies esta muy por encima de la insípida The King's Speech y de las otras nueve candidatas desde cualquier punto de vista que la analicemos, ya que es una historia, que bien podria ser real, contada con el compromiso y la crudeza necesaria para no dejar inmune a nadie. En resumidas palabras, ya que me extendí demasiado con la introducción, la película muestra las aberraciones de la guerra, lo injustificado de los hechos que la alimentan, las contradicciones que surgen al no poder identificar al verdadero enemigo y, sobre todo, las huellas imborrables que deja más allá del tiempo y las generaciones. Un grano de arena más sobre el irremediable hecho de lo que somos capaces los seres humanos.
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